Según el último informe de WWF y Tesco “Enviado a la basura, pérdida global de alimentos en granjas”, unos 2500 millones de toneladas de alimentos terminan en la basura cada año.
Impacto en el cambio climático
Desperdiciamos 1200 millones de toneladas más de alimentos de lo que se había calculado, lo que nos deja ver la magnitud del problema. En producción de estos alimentos perdidos se utiliza una enorme cantidad de tierra, agua y energía, por lo que tiene un impacto significativo en el cambio climático.
Los datos del informe indican que la contribución en las emisiones de gases de efecto invernadero de estos alimentos desperdiciados es de aproximadamente el 10%. Esto equivale a casi el doble de las emisiones anuales producidas por todos los coches que circulan por Estados Unidos y Europa.
Resultados clave del informe
- Se pierden 1200 millones de toneladas de alimentos en las cosechas de las granjas.
- Se estima que el desperdicio total supera los 2500 millones de toneladas, lo que supone el 40% de todos los alimentos producidos.
- Se cifra en más de 900 millones de toneladas las perdidas en el comercio minorista, transporte, almacenamiento, fabricación, procesado y hogares de los consumidores.
- El incremento en la cantidad de alimentos desperdiciados provoca un aumento en los gases de efecto invernadero generados, lo que implica un 10% de todas las emisiones.
- Los países de ingresos altos, a pesar de contar con una mayor mecanización en las granjas, contribuyen con el 58% de las pérdidas de cosechas mundiales a pesar de contar solo con el 37% de la población.
- Los países con bajos ingresos (63% de la población) tienen una participación del 54% en las pérdidas posteriores a las cosechas en las granjas.
- Menos de un 6% de los firmantes del Acuerdo de París han incluido la pérdida y el desperdicio alimentos en sus planes nacionales de carbono.
- El desperdicio alimenticio en las granjas produce el 16% de todas las emisiones agrícolas.
La tecnología contra el desperdicio alimentario
La tecnología debe ser usada como apoyo contra el desperdicio alimentario. Como es el caso de Essence Food, empresa gallega dedicada a frenar el desperdicio de alimentos mediante la generación de alimentos liofilizados de alto valor nutricional.
Con estos alimentos liofilizados se elaboran comida en 3D junto a Moodbytes, empresa participada por Essence Food. Además de ir hacia el residuo cero, la empresa desarrolla técnicas para poner en valor toda la cadena de suministro y garantizar el derecho de los consumidores a saber qué está comiendo, cómo ha sido elaborado, quién lo ha cultivado o dónde se ha producido gracias a la custodia de información blockchain.
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