Ante el nuevo año el mundo entero suma nuevos propósitos y promesas. Entre ellas están mejorar la calidad de vida y, dentro de esto, la moda ayuda.
ReSocial te acerca el decálogo a seguir para lograr los objetivos de sostenibilidad e ideas de cómo cumplirlos a través de pequeños gestos realizables. Una ayuda para sumar como individuos -bien vestidos- para lograr beneficios globales.
1. Consumo responsable
Anualmente se fabrican más de 100.000 millones de prendas al año: el comprador puede dar un paso adelante y preguntarse cuánto tiempo durará esa prenda: apostar por comprar menos cantidad pero de más calidad.
2. Limpieza de armarios
Seleccionar qué quedarse, qué dar y qué se debe tirar adecuadamente ayuda al medio ambiente y por lo tanto a la economía circular, dando nuevas oportunidades a las prendas.
3. Ropa de segunda mano
Desde hace años están instalados los contenedores de reciclaje de ropa en las calles españolas y en algunas tiendas. El destino de esta ropa a veces son las tiendas de segunda mano, recurrir a estos espacios es dar una segunda oportunidad, ahorrar dinero y participar activamente en la economía circular.
4. Alquilar ropa
Una opción que gana adeptos en los últimos años, especialmente para eventos o actos puntuales. No acumular ropa en los armarios ayuda en el proceso de ahorro global. En 2020 se incrementó el uso de esta práctica como consecuencia de eventos que se convocaban y que en muchos casos tuvieron que ser suspendidos.
5. Algodón orgánico
Apostar por algodón orgánico es hacerlo por el planeta ya que necesita de un 91% menos de agua para la elaboración, en comparación con el algodón tradicional, no usa pesticidas y genera menos emisiones de carbono.
6. Materias sostenibles
En todos los armarios hay pantalones vaqueros. Para su elaboración se necesita una media de 10.000 litros de agua, pasarse al vaquero sostenible implica un ahorro de agua, y cada vez más marcas cuentan con una línea propia de esta prensa. Por otro lado el 50% de la viscosa que se produce mundialmente no se fabrica con elementos sostenibles, sino con materias primas procedentes de bosques que suelen ser más antiguos y por lo tanto están más amenazados. Buscar prendas elaboradas con viscosa sostenible ayuda a la protección de estos espacios.
7. Fin de los microplásticos
Actualmente muchas de la prendas de tu armario se componen de microplásticos que acaban en los océanos tras cada lavado, un proceso que se puede reducir a través de filtros de microplásticos.
8. Acciones reales
En esta época son muchas las empresas que hablan de acciones sostenibles, como clientes podemos ayudar al medio ambiente comprobando que efectivamente se llevan a la práctica.
9. Fabricantes de ropa
Dentro de la Responsabilidad Social Empresarial y el cumplimento de los ODS destacan las condiciones de trabajo de los que elaboran la ropa. Para el cumplimiento de propósitos es necesario que estas condiciones sean acorde a los requisitos exigidos. Una tarea en la que las marcas deben implicarse para que los trabajadores tengan las condiciones de trabajo, así como salarios dignos y adecuados.
10. Cuidar la ropa
Comprar ropa que dure implica el cuidado de la misma, si es adecuado algunos estudios señalan que se pueden incidir positivamente en la huella de carbono hasta en un 25%, un porcentaje en el que se incluyen no solo los procesos de limpieza adecuados, sino optar por arreglar las prendas para alargar su vida útil.
